23 nov 2011

Ocupa de corazón

Estoy cansada de estar dando comienzos a historias que puede que nunca encuentren su forma vital de existir. A veces llegan a ser tan reales que duelen.
Estoy cansada de no poder parar este sentimiento, suele correr a distancias infinitas de mis capacidades y no puedo darle alcance para decirle que lo deje, que no lo intente más, que no se enganche a ti.
No quiero empezar a necesitarte porque se tristemente que apenas puedo sacar valor para cruzarme contigo y mirarte, de frente, como hacen los valientes.
Me deja sin fuerzas el hecho de que seas el punto y seguido con el que termino cada pensamiento.
Recreo tantos momentos a tu lado que ya me estoy acostumbrando a ti, a tus sonrisas, a tus miradas, a tu forma de tocarme y a como consigues erizarme la piel. Te guardo ahí, en el alma, en este espacio tan indefenso donde todo empieza  contigo. 
Ojalá tuviésemos dos cabezas en lugar de un solo corazón, como tenemos dos piernas, dos brazos, dos ojos... para ser yo quien tuviese la decisión de poder elegir a quién entregarme,  en que corazón busco mi nueva felicidad, mi nuevo hogar. Y no, que sin quererlo ni buscarlo, te encuentro aquí, amueblando cada rincón de este espacio ahora tan tuyo.

Á*